Malena tiene 20 años y sus papas querían ponerle Lena, pero como sabían que todos le preguntarían “Malena?” decidieron ponerle directamente Malena. Fuimos juntas al colegio.

Aunque los últimos años fueron puros desencuentros, la pandemia nos encontró al fin en capital y nos permite transitarla juntas. Pocas cosas me gustan de los desencuentros. En realidad, solo hay una: seguir descubriendo a una persona que conoces hace años y que queres hace tiempo. Por ejemplo, en esta sesión descubrí que tiene un ojo bastante mas chico que el otro. Ella me dice que siempre lo tuvo, yo nunca lo había notado. Con ella tengo uniones en muchos ámbitos de la vida: convicciones, pasiones, arte y carrera. Tiene un pelo pseudo rubio descontrolado, con un corte que se parece al mío y que fue tan al mismo tiempo que asusto bastante. Todo en la cara de Malena me parece interesante. Generalmente tiene los labios partidos, un ojo mas chico que el otro y dos cejas asimétricas y hermosas. Tiene también un gran cutis, eso siempre me dio envidia.

Esta sesión tuvo muchas fotos sonrientes, porque Malena sonríe todo el tiempo. Sin embargo, como se predispuso a ayudarme con mi trabajo para la facultad, no renegó un segundo en utilizar su cara mas seria.

Esta foto me parece hermosa, pero por sobre todo me parece hermosa porque Malena es transparente. Tan transparente, que aun en el afán de colaborar con mi trabajo, se nota que esa no es su cara. Quizás los demás vean la foto y digan "cuanto estilo!"(quizás no), pero a mi me da un poco de risa, confieso. Esa no es la cara que Malena suele tener, aunque no niego que le queda muy bien.

Entonces decía, Malena es transparente. Se le nota todo, quizás demasiado: no sabe disimular las caras de asco muy bien. Si algo no le gusta, es bastante fácil darse cuenta.

En esta foto posada sigue habiendo transparencia. Se nota que esa no es ella, se nota que hay algo de fuerza en la seriedad. Se nota, (quizás muy poco, pero se nota), que moria por largar una carcajada.

con Malena coincido en casi todo, menos en una cosa: ella confía en que existe una manera de enamorarse de alguien sin sufrir si, por alguna razón, se sucede una separación. Yo no.

Quizás yo este marcada de malas experiencias, o ella sea muy incrédula, pero aun no sabe cual seria la solución, ni tampoco se enamoro nunca, por lo que yo tengo la ultima palabra.

Sin embargo, lo que nos mantiene cerca  (aunque ella no lo sepa) es el deseo de que, algún día, de la manera mas remota, en la solución quizás mas absurda e impensada, encuentre esa manera de salvar al mundo del desamor. Aunque a mi ya me salvo un poquito.

Malena es una persona muy querible. Yo la quise siempre.


 

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